La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es una enfermedad que, en nuestro medio, está producida fundamentalmente por consumo de tabaco. Consiste en la inflamación crónica del aparato respiratorio que conduce a un estrechamiento progresivo de las vías aéreas y destrucción del tejido pulmonar. Cuando la enfermedad progresa, se dificulta el paso del aire a través de los pulmones y la difusión de oxígeno (O2) a la sangre, produciendo un déficit de aporte de oxígeno en los tejidos, que denominamos insuficiencia respiratoria.
Un trabajo del CIBERES publicado en mBio ofrece nuevas claves genómicas de la evolución adaptativa de bacterias patógenas en el pulmón de los pacientes con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
Dos trabajos liderados por María Morales-Suárez-Varela, jefa de grupo del CIBERESP en la Universitat de Valencia y catedrática del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública en la institución académica, han evaluado el impacto de las restricciones de movilidad en la calidad del aire y las emisiones contaminantes, en Valencia y en tres ciudades italianas.
Sabemos que una deficiente salud bucodental no solo guarda una relación incidental con la aparición o reagudización de algunas enfermedades respiratorias, sino que incipientes evidencias científicas apuntan a que multiplica el riesgo de tener neumonía, bronquitis o exacerbaciones de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
Cada vez que intente dejar de fumar tendrá más posibilidades de conseguirlo: Combinar el consejo médico con la medicación es lo más eficaz.
Los síntomas habituales de las bronquiectasias son una tos difícil de eliminar, tos con expectoración, falta de aliento y sufrir muchas infecciones pulmonares. Estos síntomas también se dan en otras enfermedades pulmonares más habituales como la EPOC o el asma, así que la mayoría de las veces se hacen pruebas para descartar estas primero. No obstante, se pueden tener dos de las enfermedades o incluso las tres al mismo tiempo.